lunes, 22 de febrero de 2010

El Hombre Lobo

Este fin de semana fui a ver esta película y es la caña. El guión no es original, pues es una remake del clásico del hombre lobo, una actualización con las nuevas tecnologías de lo que fué en su día el mito del hombre lobo de película.

Por fin vemos a un hombre lobo que no es un fiel y sumiso cachorrillo, ni a un licántropo que pacta con vampiros para sobrevivir, nisiquiera uno que usa a Frankenstein para dar vida a sus hijos (véase Crepúsculo, Underworld y Van Hellsin respectivamente). Este hombre lobo está solo, es feroz y tiene un instinto de caza insaciable. Es una auténtica maldición.

El maquillaje es espectacular, unos auténticos hombres lobo sin tanto ordenador. Esos primeros planos donde se ve la napia de Benicio del Toro (con ojos digitales, pero bueno) son geniales. El actor confesó en una entrevista que lo peor de las escenas, era cuando tenían que quitarle todo ese maquillaje extra que tenía y lo tenían que hacer prácticamente con una espátula de lo pegado que estaba. Quien algo quiere algo le cuesta.

El guió está algo flojo, teniendo en cuenta que está basado en una película clásica lo bueno que tiene son los efectos especiales y algunos puntazos del Agente Smith. Es sin embargo la puesta en escena de los actores la que hace que ésta sea una muy buena película para mi gusto (y para el de mi compi de cine, ambos críticos caseros de cine). Eso sí, los sustos los tienes asegurados tanto cuando te los esperas como cuando no.

No voy a dar detalles completos de la película, pero sí voy a mencionar varias partes las cuales salen, así que esta entrada contendrá mucho spoilers. Abstenerse de leer aquellos que quieran ir a verla.

Lo primero del todo es que a estos hombres lobo les falta algo de hocico. La cara está muy bien y las garras son geniales, pero para mi gusto les falta algo de hocico y quizás un rabo. Verlos correr a cuatro patas por la pantalla sin rabo hace que pierdan mucho y me recuerden a los gorilas a la carrera.

Luego está la manía de toda esta gente "maldita" de llevar la ropa hecha harapos. Ya puedes tener el mejor traje del mundo que cuando te vayas a convertir en hombre lobo vas a tener rasgaduras y sangre por todos lados. Con esa camisita abierta a lo gitano, con el pelo en el pecho. Aquí si que vale la expresión "pecho-lobo; no como el padre que siendo veterano ya en estas cosas se las ve venir y se quita la ropa antes de la transformación. ¡A PECHO DESCUBIERTO, COMO LOS VALIENTES! Y bueno, los zapatos son otra cosa. Quizás deberías quitarte tus Manolos que te han costado tanto antes de convertirte en la bestia que eres, vaya a ser que te pille sin cortarte las uñas de los pies y los acabes rajando y rompiendo.

El supuesto amor tan fuerte que puede llegar a sentir el protagonista con la prometida de su hermano es otra cosa que te hace decir what the fuck?. ¿De manera que te gusta la mujer de tu hermano? Pues menos mal que está muerto que sino...te la habrías llevado al catre en cuanto hubieras podido. Ahora, eso sí, ella también puso de su parte para el enamoramiento. Es una amor que surge demasiado rápido o que no han sabido reflejar el tiempo que pasaba mientras ellos se enamoraban.

Los gitanos de la película son gitanos-gitanos, no como los que estamos acostumbrados a ver aquí en España, estos son gitanos-aspañoles, con costumbres diferentes. Los de la película son más bien gitanos-rumanos, con esos osos bailarines hechos por ordenador, o esos carromatos formando un poblado alrededor de las hogueras. Lugar perfecto para cometer una masacre cuando el famoso hombre-lobo viene a su buffet libre. Una de las mujeres, en mitad de la refriega se le ocurre llamar a gritos a su hija para que vaya donde ella (los niños es lo que tienen, hay una pelea y se esconden justo donde no los vas a encontrar o salen corriendo a las ruinas tenebrosas más alejadas para estar "a salvo"), y lo que no se le ocurre pensar es que con sus gritos lo que hace es llamar la atención del cazador. Mujer que tu hija es más lista que tú y se ha ido a esconder, deberías hacer lo mismo.

Cuando al prota le pasan la maldición es como si lo hubieran sacado de esa película y lo hubieran metido en alguna de las tres de El Señor de los Anillos, empecó a ver Gollums por todas partes. De hecho Gollum es el origen de todo, un chaval con la maldición que mordió al padre del protagonista en una cacería y que éste transmitió la enfermedad a su hijo.

En su viaje a Londres, su gran amigo el doctor del psiquiátrico acaba haciendo lo que finalmente predijo que haría, volar por la ventana. ¿A quén se le ocurre llevar a un licántropo a una sala llena de doctores chiflávoras y ponerlo delante de la únca ventana por la que se veía la luna llena? (y sobre todo, darle la espalda). Consecuencia, otro buffet libre pero con más clase, más estilo y más dinero. Ya una vez suelto por las calles de Londres todo era fiesta y diversión: un paseito por los tejados, un "salto de valla" por encima del carro con los policías de Scotland Yard, un viajecito por uno de esos autobuses de dos pisos tan famoso con su consecuente parada a "picar algo" y finalmente una visita al Támesis por el Puente de Londres.

Cuando se acerca el final de la película descubrimos que los métodos de búsqueda de los agentes de Scotland Yard son cuando menos despreocupados. De manera que el Agente Smith se mete en la taberna del pueblo, se sienta en una mesa, se pone a leer un periódico y pide una pinta de cerveza. ¿Ése es tu método de búsqueda? Pues sí y tiene su lógica como bien dice: en el pueblo hay alrededor de 350 habitantes y suponiendo que la taberna es el lugar más frecuentado por los pueblerinos y que 280 personas del pueblo están en un radio de 500 metros, no es mal lugar para sentarse y esperar a que se cometa algún crímen. Muy buena Elrond.

En la batalla final de padre vs hijo vemos que la veteranía es un grado. Mientras el hijo está todavía sufriendo la tortículos y los espasmos de la transformación en hombre lobo, el padre ya es uno completo (algo canoso pero completo) y sin ropa, a pecho descubierto como los machotes. La lucha fue algo desigual, un padre que toma la iniciativa, que apaliza al chico y un hijo que está todo el rato en el suelo, gimiendo mientras prepara la trampa a su padre. En cuanto el otro se le tira encima, ¡zas! finta que te crió o patada en los cojones. Eso sí, si la casa ya estaba hecha un asco ahora lo estaba más todavía por los golpes, porrazos, pelos y el incendio que se creó.

No os voy a contar el final, pero os diré que tiene cabida una continuación porque hubo alguien que se contagió de la maldición. Seguro que en futuras ediciones lo vemos peleando contra Neo con sus múltiples clones en plan jauría (o luchando para conseguir el anillo de poder).

Saludos

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